El consumo de cemento en España ha caído un 2,3% en abril, alcanzando las 917.152 toneladas, 21.182 toneladas menos que en el mismo mes de 2016. Las exportaciones han caído un 5,5%, superando levemente las 760.000 toneladas, lo que supone una pérdida de 44.000 toneladas.
En el acumulado del año, el consumo es positivo, con un crecimiento del 9,6% hasta 3.786.705 toneladas, 332.711 más que en el mismo período de 2016. Por el contrario, las exportaciones han experimentado una caída del 8,6% en los cuatro primeros meses del año, hasta situarse en 2.855.090 toneladas, 268.651 toneladas menos.
“La caída del consumo ha estado motivada, en parte, por el efecto calendario, ya que este año el mes de abril ha tenido menos días laborables con motivo de la celebración de la Semana Santa”, explica el director general de Oficemen, Aniceto Zaragoza. “No obstante, seguimos observando con cautela la evolución positiva de las cifras de consumo en el acumulado anual, que vienen dadas por el impulso de la vivienda que está creciendo a un ritmo cercano al 25%. Pero como ya hemos indicado en anteriores ocasiones, la edificación residencial no puede ejercer por si sola de motor para nuestro sector, ya que seguimos y seguiremos en mínimos históricos hasta que no se reactive la obra pública”, concluye Zaragoza.