El Director General para el Cambio Climático de la Conselleria de Medio Ambiente, Agua, Urbanismo y Vivienda de la Generalidad Valenciana, Jorge Lamparero, y el Presidente de ASCER, organización perteneciente a CEPCO, Joaquín Piñón, han presentado esta mañana, tras reunirse en la sede de la asociación, la Guía de las Mejores Técnicas Disponibles para la Fabricación de Baldosas Cerámicas.

Este manual de buenas prácticas medioambientales da respuesta a la Ley de Prevención y Control Integrados de la Contaminación (IPPC), una normativa que tiene por objeto evitar o, cuando no sea posible, reducir y controlar la contaminación de la atmósfera, el agua y el suelo mediante el establecimiento de sistemas de prevención y control integrados de la contaminación, con el fin de alcanzar una elevada protección del medio ambiente en su conjunto.

El sector de fabricación de baldosas cerámicas es uno de los sectores industriales afectados por la Ley IPPC, que, desde que entró en vigor, ha supuesto para las empresas azulejeras un gran esfuerzo para adaptarse a las exigencias de la normativa, cada vez más estricta.

En la publicación presentada esta mañana se explica cómo se deben gestionar los residuos producidos; cómo utilizar energía, agua, materias primas y otros recursos de manera eficiente; e incluso las medidas a tomar para evitar cualquier riesgo de contaminación cuando cese la explotación de la instalación y para que el lugar donde se ubique quede en un estado satisfactorio de acuerdo con la normativa aplicable, entre muchos otros aspectos.

En este sentido, la Guía de las Mejores Técnicas Disponibles para la Fabricación de Baldosas Cerámicas será una herramienta eficaz para todos los técnicos relacionados con el sector; no sólo para los que trabajan en las empresas, sino también para aquellos que realizan labores de consultoría o ingeniería externa, así como para los propios técnicos de la administración.
 
Política verde en la industria cerámica

El sector cerámico, en su esfuerzo por minimizar el impacto de su actividad industrial continúa trabajando junto con la Dirección General para el Cambio Climático en la gestión de residuos no peligrosos generados en el sector, que desde 2002 -fecha en que se firmó el primer acuerdo- ha permitido perfeccionar la gestión que el sector cerámico hace de los residuos del proceso cerámico.

Otro proyecto destacable en el que actualmente está inmersa la industria cerámica es la realización de un análisis de riesgos ambientales sectorial, el cual permitirá a las empresas fabricantes de baldosas adaptarse con menos esfuerzo y recursos a las obligaciones que impone la Ley de Responsabilidad Medioambiental. Con este y otros estudios y procesos en marcha, la industria cerámica sigue no sólo adelantándose a la legislación, sino, sobre todo, proponiéndose constantemente metas que mejoren la relación con el entorno natural.

Más información:
www.ascer.org