Las ventas totales de la industria cerámica española durante el ejercicio 2008 alcanzaron, según los últimos datos provisionales, cerca de 3.700 millones de euros, lo que representó un decrecimiento estimado del 11,4 por ciento en relación al año anterior, según explicó hoy el presidente de ASCER, organización asociada a CEPCO,  Fernando Diago, durante la presentación del balance anual de este sector.

De las ventas totales, el 60% se dirigió a los mercados internacionales, donde la industria cerámica española ha mantenido de forma estable la actividad durante todo el año, permitiéndole compensar en cierta medida la importante caída de ventas en el mercado nacional.

Las ventas estimadas al exterior alcanzaron los 2.230 millones de Euros. A pesar de que esta cifra supone un decremento del 3% respecto al año anterior, lo cierto es que el valor de las exportaciones se mantuvo por encima del obtenido en 2006 y años anteriores, cuando la coyuntura internacional era mucho más favorable. Esto cabe interpretarlo como un balance positivo a tenor de la grave crisis financiera internacional que arrancó el pasado año. Este dato confirma, un año más, la gran capacidad exportadora de la industria cerámica española, un sector  que se sitúa entre los doce mayores exportadores de nuestro país.

Así, en el contexto actual y comparándolo con otros sectores afines donde las caídas son más acusadas, el cierre anual de la industria cerámica española es relativamente estable, gracias al mantenimiento de las ventas al exterior.

Parte del mantenimiento de las cuotas de exportaciones se han basado en la expansión realizada en los mercados emergentes de Europa del Este y Rusia, así como en África, donde el azulejo español sigue creciendo. De acuerdo con los últimos datos disponibles (hasta el mes de octubre), las exportaciones a Rusia aumentaron en 2008 en más del 42% en términos de valor, mientras que en África lo hicieron en un 17%.

El crecimiento en valor es una cuestión clave para la industria. Esto significa que los mercados de destino saben reconocer la calidad y el valor añadido que poseen los productos cerámicos españoles, englobados bajo la marca paraguas “Tile of Spain / Cerámica de España”, y están dispuestos a pagar un precio más elevado por ellos. La industria ha apostado en los últimos años por una producción basada en la calidad, frente al precio, y esta estrategia se ve que ha sido acertada a la vista de los resultados. En los últimos cuatro años el precio medio de exportación español ha crecido más de un 20%.

En cuanto a las ventas en el mercado nacional, durante 2008 representaron el 40% del total, lo que se traduciría en un decrecimiento en torno al 22%, alcanzando un valor cercano a los 1.460 millones de Euros.

El sector cerámico cuenta con un gran peso en el conjunto de la economía española: en 2007, últimos datos anuales, el superávit comercial del sector fue de 2.295 millones de euros. La exportación de baldosas cerámicas supuso un 1,3% del total de las exportaciones españolas. 

                          

	2007	Avance estimado 2008	Variación
Mercado Internacional	2295 M€	2230 M€	- 3%
Mercado Nacional	1871 M€	1460M€	- 22%
Total	4166 M€	3690 M€	-11,4%

Realidad y fortalezas del azulejo español

El sector azulejero se sustenta en unos pilares sólidos, con un conocimiento acrisolado y muy competitivo, una capacidad de trabajo excepcional y un espíritu emprendedor de éxito dispuesto a seguir apostando por el futuro, a pesar de que la coyuntura y situación financiera jueguen en contra. Actualmente no hay ninguna industria cerámica en todo el mundo más volcada en la I+D+i.

Así, la consolidación internacional de esta industria se ha apoyado no sólo en una sólida actividad exportadora y apertura continua de nuevos mercados emergentes, sino también en una importante actuación colectiva e individual de innovación de producto, lanzando al mercado nuevas aplicaciones y nuevos usos, como las fachadas ventiladas y los pavimentos urbanos, así como proyectos de investigación pioneros a escala internacional, como es el caso de 4 Senses, un proyecto sobre la percepción sensorial y emocional del usuario de entornos basados en baldosas cerámicas. Esto está permitiendo a nuestra cerámica ganar otras cuotas de mercado que hasta ahora pertenecían a otros productos, dentro y fuera de nuestro país.

Ante la complejidad actual del escenario económico, las empresas han reaccionado extremando y profesionalizando la gestión, eliminando las actuaciones que no generan valor y ajustando temporalmente la producción de acuerdo a la demanda.

Desde un punto de vista global, el consumo de cerámica ha crecido de forma exponencial en todo el mundo y es un producto que está ganando terreno frente a otros materiales alternativos, por sus propiedades de diseño y condiciones técnicas. Esto se debe a la decisión de la industria de promover el uso y la imagen del azulejo, mejorando su percepción entre los principales decisores de compras, tanto prescriptores profesionales como consumidor final.

Por todo esto, entidades financieras, agentes sociales, trabajadores, Administraciones Públicas y ciudadanía en general deben tener confianza en este sector, puesto que sus pilares son sólidos y su liderazgo mundial no es casual.

Prioridades inmediatas para el sector azulejero español

Apoyo Financiero

La concesión de créditos sigue sin llegar al sector cerámico. La reacción a la crisis de confianza y crediticia está penalizando a todos los sectores, como el cerámico que, en los últimos años han demostrado su solvencia y su capacidad de generar riqueza.

A todo esto se suma que las entidades de crédito y caución han reducido a mínimos las coberturas de crédito a la exportación, algo especialmente preocupante para un sector que exporta más de la mitad de su producción y que tiene en los mercados exteriores un pilar fundamentar para mantener sus ventas y permitir la continuidad de su actividad.

El sector azulejero pide al Ejecutivo Central y a la Administración Autonómica de la Comunidad Valenciana mecanismos de garantía y confianza para animar a las entidades en lo que a concesión de créditos se refiere. Los organismos financieros estatales como el ICO u otros autonómicos deben involucrarse, de la misma manera, en la actual problemática de concesión de préstamos.

Promoción del uso de la cerámica en la obra pública y planes de rehabilitación y reforma de viviendas 

ASCER solicita la promoción del uso de la cerámica  de cara a los planes de rehabilitación y reforma de viviendas diseñados por distintas administraciones, así como en el marco de las actuaciones municipales que se van a ejecutar a través del Fondo Estatal de Obra Pública que acaba de facilitar el Gobierno a los ayuntamientos de toda España.

Apoyo en el Pacto por el empleo. 

Ante la previsible desaceleración que se apuntaba a comienzos de 2008 y en un ejercicio de responsabilidad social por todas las partes, ASCER y los sindicatos UGT y CCOO suscribieron el Pacto por el Empleo con el fin de facilitar los expedientes suspensión temporal frente a los de extinción (o definitivos).  En este marco, ASCER y los sindicatos creen necesario tomar más medidas y dotarle de nuevo y mayor contenido al pacto, para el que resulta imprescindible el apoyo de las administraciones públicas (autonómica y central). Ese acuerdo contemplaría, entre otras, un plan sectorial de prejubilaciones, formación continua y ocupacional, medidas de reinserción laboral, etc. Para que el acuerdo pueda alcanzarse, ambas partes consideran imprescindible contar con el apoyo de la Administración.

Seguir impulsando las actividades de promoción e innovación

La industria, a través de su asociación, ha desarrollado en los últimos años actividades muy ambiciosas en el campo de la innovación y la promoción con el fin de revalorizar y reposicionar los productos cerámicos en el España y en el mundo. Los resultados obtenidos son muy importantes y la industria debe seguir obteniendo apoyos para seguir siendo líderes en el mundo, en calidad, prestigio e innovación.

Actuaciones de ASCER de apoyo al sector

Consciente de la situación que se está viviendo a nivel global, ASCER viene trabajando  en diferentes frentes para contribuir a que el sector pueda afrontar en mejores condiciones la actual coyuntura. Principales actuaciones:

• Pacto por el Empleo
• Plan de Promoción Nacional.
• Trabajo con ayuntamientos para la promoción del uso de la cerámica
• I+D+i
• Difusión y valorización de la marca “Tile of Spain” / “Cerámica de España”
• Impulso a las exportaciones (planes país y Plan de Promoción Sectorial)
• Impulso a la rehabilitación y reforma de edificios y viviendas.
• Extensión del conocimiento académico del azulejo (Red de Cátedras de Cerámica)
• Mejora del sistema de información económica

Ante todo lo expuesto y a modo de conclusión, ASCER expresa  lo siguiente:

1. A pesar de las importantes dificultades, el sector tiene futuro, sus pilares son sólidos y su demostrada apuesta por la I+D+i le sitúan a la vanguardia tecnológica mundial. La  cerámica española se expande por un número cada vez mayor de mercados por todo el mundo, y hoy acapara usos y espacios de revestimiento que hace años eran, sencillamente, impensables. El sector va por el buen camino.
2. El crédito financiero sigue sin llegar al sector cerámico. Esta asfixia está impidiendo que las empresas puedan mantener su actividad comercial regular y acometer los cambios necesarios para adaptarse al nuevo escenario.
3. Las Administraciones deben involucrarse definitivamente en apoyo a una industria líder mundial y estratégica para la balanza comercial española.

Acerca de ASCER

La Asociación Española de Fabricantes de Azulejos y Pavimentos Cerámicos, ASCER, se creó en 1977 sustituyendo y ampliando las actividades de la Agrupación Nacional Sindical de Industriales Azulejeros. En la actualidad, ASCER representa al 95 por ciento de la industria cerámica española. ASCER está concebida como una organización de apoyo, defensa y promoción de los intereses generales y comunes de la industria cerámica. Sus actividades vienen definidas por la conveniencia o necesidad de una actuación conjunta en aquellos campos en los que las empresas, individualmente, no pueden llevar a cabo con éxito ciertas acciones.